martes, noviembre 13, 2007

EL FUTURO

Cuando cae uno de los grandes la pregunta siempre es la misma. ¿Ahora quién? El arresto de Lo Piccolo significa más cosas, porque no parece que quede nadie en condiciones de gobernar bajo la órbita de los corleoneses. Las señales que se pueden interpretar no son pocas, peor no es fácil hacerlo. Veamos pues:

Cosa Nostra americana: Una de las claves de la situación actual hay que buscarla en el trabajo de perdón para uno de los clanes perdedores de la guerra de los 80: La familia Inzerillo. Con el golpe de estado de Totó Riina, Provenzano y compañía el vínculo con Cosa Nostra americana se deshizo casi por completo, ya que los capos americanos eran íntimos de los mafiaperdentes, es decir, de los que fueron eliminados: Stefano Bomtate, Salvatore Inzerillo, Rosario Riccobono, Buseta... Es importante calibrar en su justa medida qué esconde el deseo de una buena parte de Cosa Nostra del retorno de los exiliados, como son algunos parientes de los Inzerillo. Eso quiere decir que hay un interés económico grande, lo suficientemente fuerte como para hacer perdonar y olvidar las viejas rencillas. Ese era el plan de Porvenzano, un plan que venía diseñándose en secreto desde hacía una década. Sinceramente, hay que pensar que ese retorno de los perdedores tiene que ver con una gran oferta de Cosa Nostra americana. Una gran oferta que tiene que ver con nuevos mercados y nuevas alianzas. En definitiva, mucho dinero.

Cómo y con quién. Ese mucho dinero y garantías de estabilidad pueden ser apetitosas para las familias sicilianas, pero pueden venir con condiciones. Con condiciones de paz duradera, por ejemplo, o algo más difícil: que haya una familia siciliana que haga de representación de Cosa Nostra americana. Es decir, que haya quien haga y deshaga y pueda poner condiciones a las demás. Si hay una familia capaz de convertirse en puente de los dos territorios esa será la que gobierne una mafia que no tendrá nunca más una comisión o cúpula al estilo de la vieja Cosa Nostra.

Sin cúpula. Esta posibilidad de que Cosa Nostra se aproxime a las formas de composición de otras empresas delictivas como la camorra, donde no existe un vértice, ya se ha manifestado en alguna ocasión. No deja de ser peligroso para tiempos de debilidad como estos, pero todo está por ver.

Lo Piccolo. Desde esta perspectiva el arresto de Lo Piccolo puede entenderse de muchas maneras. Una vez más, la investigación ha tenido que ver con las aportaciones de mafiosos detenidos. No es la primera vez que ocurre que la incapacidad de matar a un capo se cambia por una drástica decisión: entregarlo a la policía. Los opositores al plan de retorno de los Inzerillo bien pudieran estar ahora muy satisfechos: no queda nadie en condiciones de ponerse al frente de tamaña empresa.
Hay muchas más claves por descifrar, porque tampoco es muy corriente lo que Lo Piccolo ha hecho: dejar un elenco de nombres, datos, números sobre sus negocios y compañeros de parrandas. Ello puede ser un error, pero también puede ser una maniobra de quitar de en medio a los colaboradores que él tenía en su lista de sospechosos de traición.

martes, noviembre 06, 2007

COSA NOSTRA EN PALERMO


Según las investigaciones el diseño de Cosa Nostra en Palermo es este en el momento de la captura de Lo Piccolo, supuesto capo dei capi y boss de la familia de San Lorenzo. Cada zona de la ciudad o mandamento tiene un capo que a su vez tiene por debajo a varios capos en cada una de las demarcaciones. Aquí pongo cada mandamento con su capo y sus familias "subordinadas".


San Lorenzo:



Capo mandamento: Salvatore Lo Piccolo, nacido en Palermo en 1942.



Capos de cada familia:
San Lorenzo: Girolamo BIONDINO
Tommaso Natale – Cardillo: Federico LIGA
Partanna Mondello: Salvatore DAVI'
Capaci: Giovanni BATTAGLIA
Carini: Salvatore GALLINA



Hombres de Honor notorios: Sandro Lo PIccolo y Girolamo Biondino

Noce:

Capo mandamento: Pietro di Napoli, "Pierino", nacido en Trapani en 1939


Capos de cada familia:
Noce: Francesco PICONE
Malaspina - Cruillas: Salvatore GOTTUSO
Altarello di Baida: Salvatore GUDDO


Brancaccio:
Capo del mandamento: Giuseppe Savoca, nacido en Lampedusa en 1934

Capos de cada familia:
Ciaculli: Filippo LA ROSA
Corso dei Mille: Pietro TAGLIAVIA
Roccella: Lorenzo DI FEDE


Boccadifalco:

Capo del mandamento: Giovanni Marcianò, nacido en Palermo en 1942, rige el mandamento en sustitución de su hermano Vincenzo.
Capos de cada familia:
Passo di Rigano - Boccadifalco: Giovanni MARCIANÒ
Uditore: Francesco BONURA
Torretta: Vincenzo BRUSCA


Santa Maria di Gesù

Capo del mandamento: Cosimo Vernengo ¿?

Capos de cada familia:

Villagrazia di Palermo: Francesco ADELFIO

Hombres de honor notorios: Carlo Greco, Giuseppe Greco


Acquasanta


Capo del mandamento: Angelo Fontana

Capos de cada familia:

Vergine Maria: Gaetano Vegna
Hombres de honor notorios: Vincenzo Di Maio, Antonino Tarantino


Pagliarelli:


Capo del mandamento: Gianni Nicchi, nacido en Turín, en 1981

Capos de cada familia:

Corso Calatafimmi: Filippo Annatelli
Rocca - Mezzo Monreale: Pietro Badagliaca
Borgo Molara: Giuseppe Capello
Villaggio S. Rosalia: Salvatore Sorrentino

Porta Nuova

Capo del mandamento: Tommaso Lo Presti

Capos de cada familia:

Porta Nuova: Salvatore GIOELI
Palermo Centro: Salvatore PISPICIA
Borgo Vecchio: Angelo MONTI





lunes, noviembre 05, 2007

CAE LO PICCOLO (ampliado y con las primeras fotografías)

(Fotografía de Salvatore Lo PIccolo y su hijo una vez detenidos)


(Salvatore Lo Piccolo ante el mundo)



El capo de Cosa Nostra palermitana, Salvatore Lo Piccolo, ha sido detenido junto a su hijo Sandro, después de 24 años de estar huido de la justicia. Tras la detención de Bernardo Provenzano estaba en la cúspide del brazo militar y primario de la organización mafiosa. Aquí encontráis enlaces a las noticias en varios medios digitales.





Detenido en Palermo Salvatore Lo Piccolo, 'capo' de la Cosa Nostra (El País)

La Cosa Nostra, descabezada (ABC)

Importante arresto en Italia (El Mundo)

Detenido en Palermo Salvatore Lo Piccolo, jefe de la Cosa Nostra (Público)




HISTORIA DE UNA VIDA "CLANDESTINA"


(con alguna referencia sacada del Corriere)





Salvatore Lo Piccolo, 65 años, señalada como el capo de Cosa Nostra en Palermo tras la captura de Bernardo Provenzano el 11 de abril del pasado año, era apodado ‘Il Barone’ en los ambientes mafiosos. Estaba en búsqueda y captura desde 1983. A su nobre había ocho órdenes de detención.
Su andadura comienza como guardaespaldas y chofer personal del capo de San Lorenzo, Rosario Riccobono, uno de los caídos en el golpe de Estado de los corleoneses a principios de los años 80. SU opción fue la de alistarse en el bando de los vencedores, poniéndose en la lista de hombres de confianza de los nuevos capos de Cosa Nostras, Leggio, Totó Riina y Bernaredo Provenzano. Lo Piccolo estaba buscado por homicidio desde 1998, y por delito de asociación mafiosa desde 2001. Internamente emergió como el nuevo referente de las familias palermitanas, sobre todo por su buena relación con las familias estadounidenses. Su plan de volver a traer a Sicilia a la familia Inzerillo, uno de los clanes perdedores de la guerra de los 80, no fue bien vista desde el lado opositor.
Su hijo Sandro, de 32 años, estaba en búsqueda y captura desde 1998, cuando escapó a una investigación de la policía en el barrio de Mondello. Estaba considerado el brazo derecho de su padre.El territorio de los Lo Piccolo comprende la parte noroccidental de la zona matropolitana de Palermo, las familias de los pueblos de Capaci, Carini, Isla delle Femmine, Villagrazia di Carini, Sferracavallo, y Partanna-Mondello. Tras la captura del capo Vincenzo Virga la influencia de Lo Piccolo ha llegado a algunas zonas de la provincia de Trapani, territorio que se le supne al otro gran exponente de Cosa Nostra, Matteo Messina Denaro.


martes, octubre 16, 2007

DIME CON QUIEN ANDAS...



Hay personas que son simpáticas, e incluso admiradas por la gran audiencia, sin más mérito que el éxito. Uno de ellos es Flavio Briatore, patrón del equipo Renault, que fue llamado a delcarar por la Direzione Antimafia, en Palermo. No tiene desperdicios lo declarado por una de los grandes capos de la F1. Conoció en New York a miembros de la familia mafiosa Genovese, de la familia mafiosa Gambino, a Felice Cultrera, manager de Catania iinvestigado en el pasado por drogas y tráfico de armas. Briatore conoció a muchos de ellos a finales de lso 70 y los 80, pero dijo que nunca tuvo ninguna relación económica o de negocios con ninguno de ellos. La investigación en la que Briatore fue llamado a delcarar busca la pista del reciclaje de dinero de Cosa Nostra. Por eso pregunaron a Briatore por muchos de sus amigos italianos en el extranjero, grandes testaferros y hombres de negocios de esos que ganan las listas de éxito. A Briatore le peguntaron por las relaciones entre algunos hombres de dudosa reputación -aunque la de Briatore es excelente- y contestó como en las películas. Cito textualmente: "Cipriani conoce a Cultrera y conocía bien al hijo de Angelo Bonnano (capo mafioso), creo que corría también para el equipo de Cipriani...No creo que Cultrera sea miembro de la familia de Genovese, ni de la de Gambino". Parece un diálogo de Uno de los nuestros, pero es Briatore largando sobre sus amigos.

miércoles, septiembre 12, 2007

Cuando sonaban las explosiones













Todas estas imágenes rememoran los años en los que el lado militar de Cosa Nostra optó por hacer la guerra abierta al Estado. Bombas, como en Irak ahora. Bombas en monumentos. La iglesia de San Giovanni Laterano, en Roma, la galería Ufizzi, en Florencia. Bombas a jueces y funcionarios del Estado como única salida para mantener el régimen. Los Corleoneses optaron por la guerra abierta porque era la angustiosa manera de mantener el poder, de no ser barridos por sus aliados. Porque habían fallado, porque habían perdido la batalla anterior. En Cosa Nostra no te llega una carta de despido. Si alguien no cree en tí, te elimina, y se coloca él. Antes de que eso ocurriera los corleoneses se pusieron a dejar bombas en todas partes. Una de ellas falló delante del estadio Olímpico de Roma, en un Roma-Lazio. De haber explotado tal como estaba preparado lo hubiera hecho en medio de un auténtico gentío.
Ahora los jefes vivos de los corleoneses parecen querer amenazar con una vuelta a la violencia. Entre ellos se escriben postales donde sale el mismo estadio Olímpico, o se dejan mensajes con ocultas referencias a Forza Italia. Provenzano no está, y sus sucesores huyen de cualquier ruido que pueda perjudicar el negocio. No van a volver las bombas, pero tampoco nadie se va a ir de su negocio. Sólo cuando el estado les obligue a defenderlo con sangre, volverán las bombas. Pero que nadie piense que auqne no haya bombas ellos no están.
















lunes, septiembre 03, 2007

LOS AMIGOS DE AMIGOS...


Son mis amigos. Vaya lío. De la entevista publicada por El País al magistrado Gherardo Colombo me quedo con la lección de ética de la parte sana, que también es grande, en la sociedad italiana. Cuando vean en la televisión imágenes de los capos, de los boss camorristas, sicilianos o calabreses, no piensen en sus jefes como pastores, campesinos o "provenzanos" que viven en una casona de campo. Piensen en Giulio Andreotti, gurú de toda la política italiana desde que acabara la Segunda Guerra Mundial, y culpable de colaboración con la mafia mientras fue primer hombre del Gobierno. Aunque el delito haya prescrito también. Piensen en Salvo Lima, honorable de la sociedad siciliana, Eurodiputado cuando tuvo que alejarse de sus amigos de Cosa Nostra, y muerto a tiros después por el feo hecho a quienes cayeron en el maxiproceso. Piensen en la Logia P2, a la que perteneció la crème de la crème de la industria, la banca y el Vaticano, con los servicios secretos a sus pies; jefes como Gelli y como Silvio Berlusconi. Apunten alto para buscar a alguno moviendo los hilos, porque ahí están los jefes, los protectores. Los sicarios disparan confiados, porque saben que alguien hará algo por ellos si pueden.

sábado, septiembre 01, 2007

A VER SI ME EXPLICO


Las cosas estas de morir en una pizzería italiana en Alemania también tienen un porqué. Se baraja que el San valentín italiano sea la respuesta de la alianza Nirta-Strangio al asesinato de la mujer de Giovanni Luca Nirta a manos de efectivos de la alianza rival, gente de los clanes Vottari, Romeo y Pelle, a los que pertenecían los sesis fallecidos. La respuesta a la muerte de la señora Nirta habría que buscarla más atrás, y quizá así hasta un día en que un señor compró un burro a otro y no se lo pagó por un quítame allí esta herradura.

¿Suena creible? ¿De verdad puede la prensa ofrecer tan ricamente historias de criminales como si fueran personajes sacados de un libro? ¿Como si fueran bandoleros a lo Curro Jiménez, o a lo Pernales, que cae más cerca?

El pueblo de San Luca, en la Lócride, no es ni peor ni mejor que el pueblo de al lado, que no sé cuál es. No es el centro de la mafia calabresa, porque la mafia calabresa está en todas partes, allá donde llegue el dinero. Como Cosa Nostra. Como la Camorra. Como todos los grupos criminales que se agarran a los grandes capitales para gobernar un territorio.

Empeñados en presentar la ndrangheta como una peculiaridad regional, como algo folklórico, a los medios se les 'olvida' que detrás de cada muerto hay una razón de peso: el dinero. Matar sólo es demostrar la fuerza, responder a una provocaciónb, reafirmar el poder. Parece mentira, pero en verdad no hay niguna razón para morir dentro del pensamiento mafioso. Se mata porque el negocio lo pide. Se muere porque algún negociante quiere más, o quiere que los tuyos sepan que quiere más. Seis muertos, o seis mil. Ganar dinero al estilo mafioso implica tener que hacer cosas así. Alguno podrá pensar que es como algunos gobiernos cuando mandan a morir a sus ejércitos para poder reflotar la industria. Igual sí es así. Lo malo de la ndrangheta es que toda Europa es San Luca. No es que el dinero lo pueda todo, sino que se tiene que poder con todo cuando es dinero lo que se quiere.

martes, agosto 21, 2007

Ahora 'Ndrangheta

El asesinato de seis italianos en una pizzería de la ciudad alemana de Duisburgo vuelve a sacar a flote la presencia mafiosa más allá de las fronteras del sur de Italia. Sicilia, Campania, Apulia; tanto es lo mismo. Las organizaciones criminales basan su fuerza en su dominio del territorio a través del control del dinero, y el dinero nunca conoció fronteras. Lo triste, y como periodista me pilla de lleno, es que se siga informando de estas organizaciones como si se tratara de pistoleros, como si el mafioso fuera un señor con una pistola en la mano y sombrero en la cabeza. Nada es nuevo en este campo, y poco se puede descubrir. Quien haya metido el hocico en la cuestión sabrá que estos pistoleros están amparados y protegidos por el dinero, por el dinero de verdad. Por las grandes industrias, por las grandes sociedades que extienden sus manos hacia abajo hasta tocar el fango donde ocurren cosas como las de Duisburgo. Matar no está de moda. No da dinero, sino que lo quita. En la cuenta de beneficios las guerras entre familias, ndrinas o clanes no salen rentables a nadie, y allá arriba, donde está el poder de verdad, no gusta el ruido. Las matanzas en Calabria sin embargo destacan por ser así, espectaculares, golpes secos a la vieja usanza, sin un final seguro. Porque los hijos de los muertos y los nietos de los muertos tienen memoria. Imponer el control sobre el territorio es imponer una manera de hacer, la fuerza; hay que hacer saber quién manda. Arriba estas cosas se soportan, son males menores que en la medida de lo posible se tratan de evitar. No pasará nada, ni en Duisburgo ni en ningún lugar. Estará todo en silencio, no leeremos ni un solo renglón hasta que vuelva los muertos, la única parte visible de todo un mundo criminal en nuestros ojos. Y en Europa.

sábado, agosto 11, 2007

Arrestos del clan Lo Piccolo

Catorce personas, entre la cuales empresarios y dos ex funcionarios municipales, fueron arrestados hoy en Palermo y sus alrededores durante una operación contra la mafia siciliana, informaron las autoridades policiales. La operación permitió el arresto de "varios miembros importantes" de la estructura mafiosa que controla la zona de Boccadifalco (suburbio de Palermo), a la cual está vinculado Salvatore Lo Piccolo, un jefe de la criminalidad organizada que sucedió al jefe supremo de Cosa Nostra, Bernardo Provenzano, tras su arresto en abril del 2006. Entre las personas arrestadas figura también Calogero Caruso, considerado como el jefe del clan de Torretta, cerca de Palermo. Según la policía, Caruso mantenía los contactos entre Lo Piccolo y otros jefes mafiosos.

jueves, junio 14, 2007

Movimiento en Palermo, asesinado el boss de Porta Nuova


Porta Nuova es históricamente una de las familias importantes en Cosa Nostra. Quien allí manda es escuchado o al revés, quien es escuchado puede mandar en un lugar como Porta Nuova. El emergente boss Nicola Ingarao, de 46 años, fue assinado de varios disparos cuando salía de la comisaría, donde cada día tenía que presentarse. Tal y como pintan las cosas, algo pasa. Hace pocos días moría Salvatore Vassallo en san Giuseppe Jato, aunque este no era uno de los grandes. Ingarao si está considerado como uno de los boss que iban para arriba, fidelísimo del encarcelado Rotolo, brazo derecho de Provenzano. Algo pasa, parece ser. Es lo que se dice cuando empiezan los muertos.

jueves, mayo 17, 2007

IMÁGENES DE LA VILLA DE WALTER SCHIAVONE


Pongo el enlace a un video en el que se muestra el palacio del boss casertano Walter Schiavone, del clan de los Casalesi. Es la villa construida a imagen y semejanza de la aparecida en 'El Precio del poder. Pinchad en la imagen y sale el vídeo de youtube

jueves, mayo 03, 2007

Cine y criminales

Villa confiscada a la camorra casertana

Cosimo Di Lauro, del clan dirigente de Secondigliano

Roberto Saviano cuenta en su libro ‘Gomorra’ (recientemente editado en castellano por Debate) cómo es el cine el que influye en los camorristas y no al contrario. Cómo las vestimentas, las poses, los gestos de muchas películas acaban siendo imitadas en las calles de las ciudades de la Campania. Cómo se copian diálogos de películas como El Profesor (Giusseppe Tornatore), El Precio del Poder (Brian de Palma), Donnie Brasco o El Padrino.
Cosimo Di Lauro, uno de los boss del clan de Secondigliano fue detenido vestido como el personaje de El Cuervo que encarnara Brandon Lee. Saviano cuenta cómo un día después todos los jóvenes de las calles del barrio llevaban esa imagen en el fondo de pantalla del móvil. Con coleta, con gabardina, vestido de negro. Un boss moderno encarnando la imagen de hombre omnipotente e inmaculado capaz de dominar el poder en la tierra donde todo se puede y todo se tiene.
Walter Schiavone, del clan casertano de Casal di Principe, se hizo construir una villa igual a la que Tommy Montana luce en El precio del Poder. Las mismas columnas, los mismos mármoles, la misma fuente en la que Montana muere en el final del film.
La mitología del cine llega a las calles, a los palacios y a la mentalidad de boss y killers. No eran así, no se parecían a nadie, salvo a ellos mismos. Ahora tienen claro cuál es el modelo a explotar: el cine les ayuda a mostrarse como quieren ser, aunque la realidad no sea el cine.Saviano cuenta la historia de dos chavales que en Casal di Principe comienzan a comportarse como verdaderos delincuentes. No llegan a los quince años, pero pasan el día reproduciendo escenas de sus películas favoritas. Pelean con cualquiera, dan palizas a novios y novias cuyo único delito ha sido pasar junto a ellos por la calle. Pronto los boss les llaman al orden, y no para felicitarles. Acabarán con un tiro entre ceja y ceja, “como en el cine”, dice Saviano. Como Joe Pesci en Uno de los nuestros, como Montana en El Precio del poder. Pero la vida no es el cine, y aquí se muere de verdad. Los cuerpos de los dos adolescentes se dejan en la playa, donde las gaviotas y los perros puedan comer algo extra. Saviano dice que eso ya no sale en las películas. Y es verdad.





El libro 'Gomorra' de Roberto Saviano ha sido publicado en la editorial Debate. Su lectura es la mejor recomendación para saber de verdad cómo es la vida en la Campania italiana. Después de haber vivido allí puedo decir que muchas cosas no se ven solo con los ojos. Ha ce falta detenerse y ser uno más.

jueves, abril 26, 2007

Mafia mediática, mafia burguesa, por Roberto Scarpinato

Bernardo Provenzano: un útil genio del mal.
De prestar fe a los medios de comunicación nacionales parecería que, tras la detención de Provenzano, el problema de la mafia se ha resuelto felizmente o que en cualquier caso se encamina hacia una solución. Algunos magistrados que gozan de amplio público mediático se han atrevido a afirmar que la mafia está doblegada, quizá sugestionados por el fragor mediático y por declaraciones de ese jaez hechas por diputados prestigiosos que se han apresurado a afirmar que el problema de la mafia ya no es una cuestión nacional sino regional. De prestarles fe a todos ellos parece que dentro de poco a los forasteros que se acerquen por primera vez a Palermo y pidan información sobre la ciudad les podremos responder en coro, como en la película de Benigni Johnny Stecchino : “En Palermo, queridos señores, existe un grave problema: el tráfico”. Bromas aparte, no creo que la realidad sea así.El que vive en la dura cotidianeidad de las trincheras palermitanas, se ve obligado a sentir en su propia piel lo sideralmente lejana que está la realidad de esa otra edulcorada y virtual que ofrecen los medios de régimen. Se ve obligado a sentir cómo Palermo, metáfora de Sicilia y cada vez más del sistema Italia, se ha hecho otra vez con su profunda identidad, una identidad a la que, más que la mafia, perturbó la antimafia del período de la fiscalía de Gian Carlo Caselli; se ve obligado a sentir cómo ha vuelto a ser el pueblo de las tribus, de los cabildeos, de los clanes, del clientelismo, del nepotismo, terreno de cultivo de todas las mafias. Se ve obligado a sentir cómo Palermo sigue siendo un lugar donde no existe más estatuto de ciudadanía que el de súbdito y cliente y donde, si no formas parte de la casta de los poderosos y no tienes intercesores en las altas esferas, tienes derechos sobre el papel y vivir se te hace difícil, a veces un infierno, y te encuentras a un paso de la muerte. Digo “a un paso de la muerte” porque esta es una ciudad donde la mala sanidad, hija de la mafia blanca y de la mala política, siembran 40 muertes en un solo año. Son cifras de espanto, de Tercer Mundo.Este es un lugar donde, si no tienes buenos contactos personales en el mundo de la sanidad, resulta que el mejor médico sigue siendo Alitalia: coges el avión y te curas en la Italia civil. Una ciudad donde, en lo tocante a nombramientos de dirigentes y distribución de recursos públicos, imperan el clientelismo, el nepotismo, el reparto por lotes sin ningún respeto de la meritocracia ni del interés público, de modo que a los que se empeñan en mantenerse firmes y no se resignan a vender el alma a algún padrino político-mafioso se les deja al margen. Una ciudad donde no tiene sentido hablar de trabajo libre y digno, porque la realidad dramática y masiva es que miles de trabajadores del sector terciario o de la construcción, con tal de que no les despidan, aceptan que no se pague su cuota a la Seguridad Social o el recorte en negro de su nómina hasta del 40%. Una ciudad en la que muchísimas empresas siguen en el mercado gracias a la evasión fiscal, a que no se paguen las cuotas de los empleados, a los sueldos míseros, a la sistemática violación de las normas de seguridad en el trabajo que ocasionan muertos todos los años, accidentes en el trabajo que los trabajadores casi nunca denuncian porque, de lo contrario, les tachan de revoltosos y poco de fiar y les marginan del mundo laboral. Una ciudad en la que muchas otras empresas engordan, pero no gracias al respeto de las reglas del mercado, sino gracias a la construcción de auténticos oligopolios de sectores protegidos por políticos y mafiosos poderosos. Una ciudad donde el que desea montar una empresa libremente tiene que afrontar dificultades como éstas entre otras mil y, de necesitar financiación pública o autorizaciones, se suele encontrar ante la dramática elección de tener que renunciar o agachar la cabeza y pasar a formar parte del feudo de alguna tribu política a la que jurará lealtad eterna. Una ciudad en la que la distancia entre pobres y ricos crece vertiginosamente. Mientras en el centro histórico los bolsos de dos mil euros de Louis Vuitton se venden como rosquillas, en barrios degradados como el Zen, abandonados a su suerte, crece de modo vertiginoso el número de desesperados que, con tal de huir de un destino infame, con tal de no seguir tirando del carro por cuatro liras sin dignidad, están dispuestos a todo.Sin embargo, frente a todo ello, frente a todo lo que queda sin mencionar, pues de lo contrario podríamos pasarnos tardes enteras haciendo inventario de la ilegalidad en masa que azota esta ciudad, los medios de régimen han hecho creer a la opinión pública que en Sicilia existía un único gran demiurgo del mal, un único gran tejedor de ilegalidad, una única causa de subdesarrollo: el genio del mal Bernardo Provenzano y sus acólitos. No ha habido ningún negocio sucio estos últimos años, desde la mala sanidad hasta la manipulación de las contratas, desde los nombramientos trucados de los doctores catedráticos hasta los ejecutivos del sector público, tras el que no haya planeado el espectro del genio del mal, Bernardo Provenzano.De ahí que la epopeya mediática de Provenzano se haya convertido en una sucesión de reportajes televisivos y periodísticos sobre la dieta de Provenzano a base de requesón, miel y achicoria, sobre la próstata de Provenzano, su cicatriz, y suma y sigue. De ahí la obvia ecuación mediática de que tras la detención de Provenzano y sus secuaces se han resuelto finalmente todos los problemas, y por tanto, la mafia ha dejado de existir o se ha convertido en un problema local, con el consiguiente apagón de los focos nacionales y el inminente recorte de recursos para las fuerzas de policía, la magistratura, etc.
La censura de los medios de régimen Para comprender cómo es posible tramar tan colosal timo cultural que induce a engaño a la opinión pública nacional y hasta a algunos agentes culturales de buena fe, cabe la siguiente reflexión: que el saber, y más concretamente, el saber sobre la mafia, no ha sido jamás inocente ni neutral. El sistema mediático y cultural que crea el objeto mafia y la percepción colectiva de la mafia no es un mundo aparte, sino que refleja en su seno las mismas relaciones de poder que existen en el mundo político de la sociedad. La estrategia que ha adoptado desde siempre este sistema de poder, que se ha vuelto especialmente refinada en estos últimos años, ha consistido en centrar todo el foco informativo en Provenzano, convertido en el icono mediático polarizante que ha permitido oscurecer todo lo demás. Con la expresión “todo lo demás” me refiero al renovado papel hegemónico que ha adoptado la burguesía mafiosa, la cual ha vuelto a ser hoy, tras la década del paréntesis corleonés, la de siempre en la historia de la mafia: el pilar central del sistema del poder mafioso.A propósito de oscurecimiento, durante años la RAI y las televisiones privadas han ejercido una censura sistemática de todos los casos criminales en los que estaba implicada la burguesía mafiosa. Pongo sólo unos ejemplos. Si le preguntamos a un ciudadano de Bolonia o de Padua o de Roma qué pasó por fin con el proceso Andreotti, nueve de cada diez respuestas son que la de Andreotti fue una absolución definitiva. Y si este ciudadano llega a saber que, por el contrario, con sentencia firme se ha comprobado que Andreotti mantuvo relaciones orgánicas con la mafia hasta 1980 y participó en reuniones con jefes mafiosos en Sicilia en las que se planeaba el asesinato del presidente de la Región [Sicilia] Piersanti Mattarella, te mirará incrédulo y asombrado.¿Cómo se ha podido producir esta obra maestra de la desinformación masiva? Me detengo en este aspecto porque constituye un prototipo de la desinformación de régimen. Todas las audiencias del proceso Andreotti fueron grabadas con cámaras de televisión. El presidente del tribunal, al inicio del proceso, para evitar que la sala de la audiencia se transformara en un campamento ocupado por decenas y decenas de operadores de televisión de todo el mundo, autorizó sólo a la RAI a grabar las sesiones, imponiéndole que las cediera a las televisiones privadas. Pues bien: al final del proceso se impidió que se dedicara un programa de la famosa serie de la RAI Un giorno in pretura [Un día en el juzgado] al proceso Andreotti. De modo que los italianos han podido ver numerosos programas de esta serie dedicados a crímenes pasionales, robos o violaciones, pero se les ha negado ver una síntesis del que se se conoce como “proceso del siglo”.La televisión alemana pidió a la RAI una copia de las grabaciones televisivas previo pago. La RAI negó la autorización. Bruno Vespa [presentador de Porta a porta , tertulia nocturna de RAI 1 en onda de lunes a jueves (n.del t.)] dedicó un programa triunfal a la absolución de Andreotti en primera instancia. No obstante, cuando en segunda instancia y en casación Andreotti fue condenado por colusión con la mafia hasta 1980, Vespa dedicó dos programas al Padre Pio y a la vertiginosa subida del precio de las hortalizas en Italia. Lo mismo hizo Vespa cuando Marcello Dell’Utri fue condenado en primera instancia a 9 años por colaboración con la mafia. Esa noche dedicaron el programa, si no recuerdo mal, a la sexualidad de los cincuentones. El historiador Nicola Tranfaglia ha contado las gravísimas dificultades que ha tenido que superar para encontrar un editor que le publicase un libro sobre el proceso Andreotti. La actriz Piera Degli Esposti afirmó que, como consecuencia de fortísimas presiones, hubo de renunciar a montar un espectáculo teatral sobre el proceso Andreotti. Seguro que todos recuerdan la polémica que generó un programa de ReportEl reportaje de Mariagrazia Mazzola explicaba cómo en Sicilia el pago del pizzo [el “impuesto” mafioso] era un fenómeno de masas. Al cabo de una semana se urdió un programa de “reparación” durante el cual fueron entrevistados algunos empresarios que declararon no haber tenido contacto alguno con la mafia. Quiso el azar que 15 días después la Fiscalía de Caltanissetta, en el transcurso de una investigación sobre la mafia, verificara que estos empresarios estaban involucrados en el pago de sobornos. Recordemos también la censura de la RAI del programa [ “La Matanza” Blu Notte ] de Carlo Lucarelli dedicado a los inductores de las masacres y la censura reciente de la serie sobre Falcone.Estos son sólo algunos de los episodios más conocidos. Pero los periodistas que trabajan en la RAI cuentan en petit comité , cómo viven en persona la censura cotidiana de las noticias de mafia relativas a la mafia política y los profesionales liberales; una censura que a veces consiste en cortar los reportajes, otras en edulcorarlos, otras en retransmitirlos entrada la noche. Como demostración de que el sistema mediático y cultural italiano reproduce en sí mismo las relaciones de fuerza que el sistema político, recuerdo que el último informe de la Comisión Parlamentaria Antimafia, aprobado por la mayoría del centroderecha, llegó al extremo de negar de hecho el carácter estructural del vínculo entre mafia y política, reduciéndolo a una situación transitoria –leo textualmente— “ligada a condiciones de incultura, escasa movilización, tensiones sociales y momentos de crisis moral y económica”.Esta censura sistemática en lo tocante a la mafia burguesa por parte de los medios del régimen tiene su exacto equivalente en la información en sentido único acerca de la mafia militar con el ininterrumpido anuncio publicitario sobre Provenzano, elevado a símbolo totalizador de la mafia. La culminación de esta estrategia ha sido, según mi parecer, la captura de Provenzano dentro de su refugio de Montagna dei Cavalli. No sé si la vieron ustedes. Vuelvo a casa, enciendo la televisión y tengo la impresión de que se ha montado una reproducción del refugio en un estudio de televisión. Creo que es de pésimo gusto. Cuando se amplía la panorámica no puedo dar crédito a mis ojos. ¡Era ni más ni menos que el refugio de Provenzano! A un lado se veían agentes de la policía científica con buzos blancos buscando huellas, al otro una manada de periodistas y cámaras tocándolo todo. Las cámaras se recreaban obsesivamente en cuencos sucios de requesón o en el mobiliario y los cachivaches rústicos del refugio de Provenzano. El mensaje cultural era explícito y unívoco: ¿habéis visto lo que es la mafia? Una historia de baja estofa criminal y antiguos pastores como Provenzano que viven en casas de labranza como esta, que todavía apestan a establo. Mensaje amplificado a lo grande los días siguientes. En el programa de la cadena 7 Otto e mezzo , presentado por Giuliano Ferrara, los contertulios, entre carcajadas, guiños y codazos, derrochaban sarcasmo al hablar de todos los magistrados que durante estos años han sostenido teoremas según los cuales la mafia es una historia que atañe a los profesionales liberales.
Burguesía mafiosa y burguesía nacional de régimen Con esta premisa, es evidente que abordar el problema del futuro de la mafia partiendo de la captura de Provenzano y teniendo en cuenta únicamente los equilibrios internos de la mafia militar y popular significa caer en la trampa cultural urdida por los aparatos de régimen. Significa picar el anzuelo de los estrategas de la desinformación forjada con una información de sentido obsesivamente único. Estoy convencido de que el futuro del sistema del poder mafioso no se decide en torno al destino de un Provenzano hoy, de un Riina ayer, de un Luciano Liggio anteayer. Quien conoce la historia de este país sabe que el presente y el futuro de la mafia, hoy como ayer, se decide más bien en la evolución interna de la burguesía mafiosa, uno de los componentes estructurales de la burguesía nacional de régimen. Quien conoce la Historia con mayúscula de este país sabe que la historia de la mafia no es sólo un asunto de baja estofa judicial, sino sobre todo la historia de sectores de una de las clases dirigentes más violentas de Europa, que desde la unidad de Italia hasta hoy ha usado la violencia mafiosa para bloquear los procesos de renovación política que ponían en peligro el sistema de poder basado en los privilegios y la injusticia social. Es la burguesía mafiosa la que, en la inmediata posguerra, ordena la matanza de Portella della Ginestra después de que la izquierda ganara las elecciones regionales de 1947. Y es la burguesía nacional la que encubre después a los instigadores políticos a nivel nacional. Esa matanza y las decenas de asesinatos de sindicalistas del mundo político y campesino cerraron para siempre una etapa política, condenando al movimiento campesino al atraso e inaugurando el centrismo tanto en Roma como en Palermo. Desde entonces la izquierda no volvió a ganar las elecciones y quedó condenada a ser una fuerza minoritaria que oscilaba entre la oposición y el compromiso. Cuando, unos 30 años después, Piersanti Mattarella, siguiendo los pasos de Moro, intentó abrir las puertas del gobierno a la izquierda, la burguesía mafiosa, una vez más, cometió un asesinato político-mafioso que cerró para siempre en el ámbito nacional la etapa de los gobiernos de solidaridad nacional.El proceso Andreotti ha fotografiado y entregado a la historia este asunto dramático. La reuniones en las que se discutió sobre el asesinato de Mattarella y en las que participan los jefes de la mafia militar, los máximos exponentes de la burguesía mafiosa de la época, Lima y los primos Salvo y el símbolo vivo del poder político nacional Giulio Andreotti, no son sólo un capítulo importante de un asunto procesal, sino el fotograma que resume y simboliza toda una historia nacional. Si queremos entender qué ha sido la mafia, qué es hoy y qué será mañana, tenemos que dejar a un lado los requesones y las próstatas de Provenzano que nos han propinado los aparatos culturales de régimen y entablar una reflexión, un debate nacional serio sobre este y otros asuntos. Debería quedar claro a todos que hace más de un siglo habríamos podido librarnos de los Provenzanos de ayer y hoy si no hubieran gozado, en Palermo como en Roma, de la protección de los vértices del poder regional y nacional.
De Calciopoli a los listillos del barrio: Sicilia marca la pauta Lo más grave de todo es que Sicilia marca la pauta. Los casos judiciales de estos últimos años a nivel nacional, desde Calciopolii a la bancopoliii de los listillos del barrio, del caso Savoia al caso Parmalat, de la reciente corrupción descubierta en Apulia al caso Sismi, dibujan el perfil de una Italia en la que amplios sectores de la clase dirigente están aglutinados en una asociación criminal que toma prestado, al menos en parte, el método mafioso para llevar a cabo operaciónes bancarias, conquistar sectores de mercado, hacerse con el control de las contratas y obtener ilícitamente financiación pública para librarse de los adversarios políticos. Asociación con fines delictivos que a veces parece parte de una red más vasta.El método mafioso a veces se distingue claramente. Refiriéndose a una reciente investigación que le ha llevado a pedir la detención del antiguo presidente de la región de Apulia por corrupción, el fiscal adjunto de Bari ha declarado textualmente: “Hemos encontrado un modo de administrar comparable a la organización de una cúpula destinada a favorecer el interés privado de unos pocos”. En otros casos el método mafioso queda patente al leer las transcripciones de escuchas telefónicas en las que unos personajes del mundo de la delincuencia son capaces de condicionar sectores enteros gracias al poder de intimidación que les otorga su pertenencia a importantes grupos de presión. Lo cual pone en evidencia que el problema de la mafia es nacional, contrariamente a quienes sostienen que su ámbito es regional. Se cumple así la previsión de Sciascia, quien decía que cada año que pasa la mancha de aceite sube un poco más hacia el norte. Al explicar el sentido de su novela El contexto , en la que denunciaba la “mafiosación” insidiosa de la sociedad italiana, el escritor describía así Italia: “Un país donde ya no tenían curso las ideas, donde las ideologías se reducían, en política, a meras denominaciones en el reparto de papeles que se asignaba el poder, donde sólo contaba el poder por el poder. Pueden ser sicilianos e italianos la luz, el color, los accidentes, los detalles; pero la sustancia quiere ser la de un apólogo sobre el poder, sobre el poder que se difumina en la forma impenetrable de una concatenación que podemos llamar, a grandes rasgos, mafiosa”. (...)
El peligro de una “democracia mafiosa” En el mundo de la política, gracias a la reforma electoral, favorecida por la cerrazón del centro-izquierda en las primarias, todo el poder se ha concentrado en manos de unas reducidas oligarquías de partido, de cúpulas de partido. En el Parlamento, una docena de personas elaboran las listas al margen de cualquier proceso democrático y deciden por su cuenta quién debe ser elegido. Mario Pirani ha escrito al respecto que hemos vuelto a los tiempos de las monarquías decimonónicas, cuando el nombramiento del Parlamento era una concesión graciosa del monarca. En el mundo del trabajo, con la ley Biagi, se ha producido una auténtica institucionalización del caporalato.iii En el mundo de la magistratura todo el poder se ha concentrado en manos de 26 fiscales, pequeños césares convertidos en los únicos titulares del poder penal. La fascistización y la feudalización del estado de la sociedad civil ha sentado las bases para la creación de la sociedad de la obediencia, una sociedad que gira en torno a la relación amo-cliente, soberano-súbdito. Si tenemos en cuenta que el sistema mafioso se basa precisamente en esta lógica, en hacer prevalecer el poder personal sobre el poder impersonal de la norma, el interés personal del clan sobre el interés público, en la cultura de la obediencia y la sumisión a los jefes, se comprende cuál es el motivo cultural y sistémico de la proliferación del método mafioso a escala nacional que profetizaron Sciascia, Pasolini, Tranfaglia y otros.Con estas premisas, me parece evidente que hoy como ayer el futuro de la antimafia no se decide en Palermo, sino en Roma. Cuando las políticas criminales y la acción judicial deben medirse con fenómenos criminales que, como la mafia, tienen una profunda raigambre social y macropolítica, sólo pueden incidir en los efectos, pero no en las causas. Hoy más que nunca, frente a la degradación autoritaria y feudal del sistema político italiano, no es posible, a mi entender, siquiera imaginar una estrategia antimafia si antes no se restablecen las condiciones para la acción democrática. Esta acción democrática pasa por una sistemática “desmafiosación” del sistema político y cultural italiano. (Uso este término, “desmafiosación”, en la acepción de Sciascia y Tranfaglia.) O si se prefiere, pasa por la eliminación sistemática de todas las toxinas introducidas durante estos años en el ordenamiento. Toxinas como la institucionalización del conflicto de intereses, la legalización de la ilegalidad de la clase dirigente, el secuestro de la soberanía popular, la creación de un derecho desigual, la feudalización del tejido institucional, el amordazamiento de la información libre, la precarización de las relaciones laborales, la sustitución del poder impersonal y general por el poder personal de los jefes, la sumisión de la magistratura al control oblicuo de la política, la legitimación cultural de la corrupción y de la relación entre mafia y política mediante la candidatura y la elección de sujetos procesados y condenados por corrupción y mafia. Si no se eliminan pronto estas toxinas del ordenamiento, del tejido institucional italiano, el método mafioso, a mi juicio, está destinado a ser un componente estructural de la política y la sociedad italiana y podremos encaminarnos alegremente por la senda de lo que algunos analistas políticos llaman “democracia mafiosa”. Parece un oxímoron, pero no lo es. Los ayuntamientos disueltos por la mafia son un ejemplo de “democracia mafiosa”. En el fondo, si la denostada Propaganda 2iv de los años ochenta se ha convertido en estado, si lo que hasta hace diez años parecía política-ficción se ha hecho realidad y ya nos hemos acostumbrado a convivir con ello, ¿por qué no habríamos de acostumbrarnos también a una burguesía mafiosa? Quizá no sea descabellado imaginar que en ese hipotético futuro el denostado Provenzano también reivindique su rehabilitación, como precursor clarividente y padre fundador de la nueva constitución material de la nación.Notasi Fraude deportivo consistente en arbitrajes amañados descubierto en mayo de 2006 tras unas escuchas telefónicas a Luciano Moggi, dirigente del Juventus.ii Conjunto de escándalos financieros que tuvieron lugar en Italia a partir de julio de 2005 con motivo de las opas a los bancos Antonveneta y Banca Nazionale del Lavoro.iii Caporalato: sistema de explotación de mano de obra, sobre todo agrícola, reclutada ilegalmente por intermediarios (caporali) y pagada por debajo del salario mínimo. iv Logia masónica secreta dirigida por Licio Gelli a la que pertenecían 953 nombres destacados de la política, la economía, el ejército, el mundo editorial y la justicia italianas. Entre los documentos que se encontraron figuraba un “Plan de renacimiento democrático” que establecía las fases para hacerse con el control del estado.

Roberto Scarpinato fue uno de los fiscales del proceso a Andreotti. Es uno de los pocos magistrados en activo de la “vieja guardia” contra Cosa Nostra. Actualmente sigue trabajando en la fiscalía de Palermo.Fuente: http://www.adistaonline.it/index.php?op=articolo&id=28480Traducido para EncontrArte por Gorka Larrabeiti y Juan Vivanco, miembros de Cubadebate, Rebelión y Tlaxcala . Este artículo se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y citar a sus autores y la fuente.

jueves, marzo 29, 2007

“La mafía è viva” Encontrado un arsenal de Cosa Nostra.


Partinico es uno de los santuarios de la organización. No más importante que otros, es decir, importantísimo. Como Alcamo, como Bagheria. Poblaciones donde se respira el olor de la trampa, de la corruptela, del miedo, allá por donde se pisa. En la noche pasada la Squadra Mobile y la Dirección Central Anticrimen de la Policía de Estado encontraban en un inmueble de Partinico pistolas, ametralladoras, munición... Armas en condiciones óptimas para ser disparadas. El edificio había dado cobijo a uno de los mafiosos investigado en los años noventa –y ahora ya muerto-.
Al mismo tiempo, la ciudad de Messina vivía el arresto de 23 personas por un delito de usura, extorsión y droga. No lo escribo hoy porque sea más importante que las operaciones de ayer o de mañana. Es el pan de cada día. En Europa. Como si nada.

martes, marzo 20, 2007

REPORTAJE EN 'EL PAÍS'

Cuelgo aquí el enlace a un reportaje publicado en la edición de 'El País' de este pasado sábado, donde se especula con el probable dominio de Salvatore Lo Piccolo en Cosa Nostra, amén de dar algún que otro dato verz sobre la manrea de hacer de Cosa Nostra

miércoles, marzo 14, 2007

El Código Provenzano, en las librerías

ROMA (Reuters) - Si usted pensaba que descifrar "El Código Da Vinci" era difícil, trate de interpretar "El Código Provenzano," la clave secreta que el "jefe de los jefes" de la mafia inventó para gobernar la organización criminal durante años, cuando era el hombres más buscado de Italia.
Números, letras del alfabeto, citas bíblicas, referencias a Jesús, están todos en un nuevo libro del magistrado siciliano Michele Prestipino, que trata de revelar los misterios de la mafia que salieron a la luz con el arresto de Bernardo Provenzano, en abril del año pasado.
"El Código Provenzano," que llegó a las librerías italianas el jueves, usa docenas de "pizzini," pequeños trozos de papel, que el jefe de la mafia escribía para comunicarse con sus tenientes, para intentar reconstruir la historia reciente de la organización criminal de Sicilia.
"Esta no es simplemente vista en primer plano por parte de gente de afuera, esto es la Cosa Nostra explicada por la Cosa Nostra, la mafia explicada por los mafiosos en sus propias palabras," dijo Prestipino a Reuters en una entrevista telefónica desde Palermo, capital de Sicilia.
"Tenemos ahora lo que equivale al mayor archivo de la mafia de la historia," agregó.
Provenzano fue el líder indiscutido de la mafia siciliana desde 1993 hasta que su arresto, el 11 de abril del 2006, puso fin a 43 años en el negocio.
Cuando la policía finalmente lo pescó en su finca cerca de la ciudad de Corleone, que cobró fama en las películas de "El Padrino," su "centro de comando" definitivamente no era de alta tecnología.
El arsenal que Provenzano blandía para dirigir la mafia consistía en dos máquinas de escribir, una manual y otra eléctrica, un diccionario y una copia de la Biblia llena de etiquetas, subrayados y anotaciones sobre versículos del Antiguo y Nuevo Testamento.
Una tabla rústica de madera servía como escritorio sobre la que descansaban una casilla de entradas y otra de salidas, con las que le seguía el rastro al negocio.
MANTENLO ENTRE TUS DEDOS
Los "pizzini," escritos a máquina en papel cebolla y doblados decenas de veces hasta que pudieran incluso entrar entre dos dedos del pie, eran sellados con cinta transparente y enviados a través de una cadena de mensajeros.
"El lenguaje que usaba es el único instrumento que tenemos para entender la personalidad del hombre que encabezó por más de 10 años una de las organizaciones del crimen más poderosas," dijo Prestipino, quien escribió el libro junto al periodista Salvo Palazzolo.
Provenzano, quien abandonó la escuela en Corleone después de segundo grado, a menudo escribía en un italiano con errores gramaticales. Asignaba números del dos al 164 para sus cómplices, él era el uno, y muchos de ellos no sabían qué cifra refería a quién.
Uno de los cómplices más misteriosos era conocido como "el adorado Jesucristo." Figura en varias notas, en las que Provenzano le agradece por sacar a la mafia de aprietos.
"No sabemos si 'el adorado Jesucristo' es una persona o un grupo," dijo Prestipino. "Cuando escribía a sus subordinados, nunca revelaba las identidades."
Fuente: Agencia Reuters

jueves, febrero 08, 2007

MUERE NENÈ GERACI, ANTIGUO BOSS DE PARTINICO


Fue condenado como uno de los que ordenaron las muertes de Paolo Borsellino y Giovanni Falcone, además de los asesinatos del presidente de Sicilia, Piersanti Matarella, el eurodiputado Salvo Lima y Michele Reina.

Cumplía cadena perpetua, auqnue debido a su avanzada edad (90 años) y su grave estado de salud estaba en su domicilio particular, donde ha muerto de un ataque cardiorespiratorio.

viernes, febrero 02, 2007

POSIBLE ROSTRO DEL PRESUNTO NUEVO JEFE DE COSA NOSTRA


Aunque solo es una hipótesis, la policía italiana trabaja con la idea de que Salvatore Lo Piccolo es el sucesor como capo dei capi tras la detención de Bernardo Provenzano. La llamada operación Occidente permitió hace pocos días apresar a casi cincuenta hombres de las familias de San Lorenzo, Mondello, Partanna y Carini, estrechandose el cerco sobre el gran jefe Lo Piccolo, huido de la justicia desde hace 23 años.
La policía ha confeccionado este retrato robot a partir de las declaraciones del mafioso Nino Giufré, colaborador de la justicia. Es curioso que la Policía apunte a un dato importante para reconocer a Lo Piccolo: "permanentemente lleva un Marlboro en los labios". Ignoramos si encendido o apagado. Muy importante, no lleva sombrero.

lunes, enero 29, 2007

AMERICANOS EN SICILIA, EL ULTIMO BANDIDO (Y II)

El director italiano Francesco Rosi eligió rodar su película 'Salvatore Giuliano' en los mismo escenarios en los que vivera el bandido. Y para rodar la escena de la matanza de Portella delle Ginestre, eligió filmar en el mismo lugar, contando con los vecinos del pueblo para reproducir un episodio del que muchos habían sido testigos. Al oir las fingidas ametralladoras la gente comenzó a correr y girtar presa del pánico, reviviendo lo que apenas diez años antes había sido real. Once muertos, más de treinta heridos. Los autores de la matanza son, todavía hoy, un misterio. Está demostrado que las balas disparadas procedían de ametralladoras Beretta, armamento del que no disponían los hombres de Giuliano. Sí estaban entonces en propiedad de grupos neofascistas. El 22 de junio del mismo año la banda de Giuliano asaltó las sedes del Partido Comunista y de las Cámaras del Trabajo de la zona. Poco después, las victorias de la Democracia Cristiana comenzaban a alejar el miedo al 'peligro comunista', y con ello hacían de Giuliano un elemento incómodo, un antiguo aliado con sufiente información. Li Causi, lider comunista siciliano, se dirigía al bandido a través de la prensa para pdeirle que diera información, nombres sobre los autores de Portella, advirtiéndole de que el primer ministro, el siciliano Scelba, podía estar ya planenando la muerte del bandido: "¿No comprende que Scelba va a hacer que le maten?".
En verano de 1950 comenzaba el juicio a los hombres apresados de Giuliano. La matanza de Portella podía ser esclarecida. Un mes después aparece el cadáver de Salvatore Giuliano, muerto en un patio de Castelvetrano a manos de los carabinieri, según la versión oficial. Al poco tiempo Gaspare Pisciotta, lugarteniente de Giuliano, es capturado. Muchos lo señalan como autor material de la muerte del bandido, aunque otros señalan que fue el mafioso local el que mató a Giuliano mientras dormía en la casa de un abogado notorio del pueblo. Pisciotta, en realidad agente de los carabinieri, disponía de un pase especial de la policía para moverse por la isla. Tras su detención, Pisciotta avisó de que iba a revelar informaciones clave para entender la alianza mafia-bandidos-carabinieri así como la verdad sobre Portella delle Ginestre. En la cárcel, a la espera de juicio, se dedicó a escribir su autobiografía. Esta terminaría precipitadamente una mañana en que Pisciotta fue envenenado con estricnina en el café. Elementos mafiosos fueron los encargados de borrar testimonios incómodos. Por supuesto, la autobiografía de Pisciotta jamás fue encontrada.
CONCLUSIONES. A día de hoy, las claves para entender qué hay tras la matanza de Portella delle Ginestre apuntan alto: Casarubea ofrece informaciones importantes que han sido obviadas por la investigación judicial:
-La carta que Giuliano recibió justo antes de Portella. Tras leerla, Giuliano dijo a sus hombres que la hora de la liberaciónb estaba cerca. Nadie sabe quién escribió aquella carta.
-Tras Portella, el jefe de la policía de Sicilia se reunión con mafisos de Monreale en la capital romana. Allí se tuvo una delcaración escrita por Giuliano que nunca más apareción.
-El mismo jefe de la policía mantuvo contacto con Giuliano, y al menos en una ocasión se reunió con Giuliano.
-En días anteriores a Portella se vio en la zona a J.J. Angelton, jefe del X-2, contraespionaje americano. También en la zona está testificada la presencia de Lucky Luciano, boss americano con excelentes relaciones profesionales con los servicios secretos.
-Sicilia estaba siendo caldo de cultivo para grupos neofascistas paramilitares vigilantes de alejar el voto de izquierdas de las instituciones.
Según las investigaciones de Casarrubea, mostradas en la obra de Joan Queralt ('Crónicas mafiosas', editado en Cahoba), la banda de Giuliano fue un pelotón de ejecución en manos de grupos fascistas que operaban en el proyecto de restauración del fascismo: La Escuadra de Acción Mussolini, Batallón Vega de la décima Mas de Junio Valerio Borghese, yl el Frente Antibolchevique. Estos grupos gozarían de la proteción del ministro Scelba, y contarían con el apoyo de los servicios secretos americanos.
Giuliano y su banda se hizo ver en la mañana de Portella. Querían o debían ser vistos, siguiendo las instrucciones dadas. A unos pastores se dirigió para decirles: "id y decid que somos quinientos". Quinietos eran precisamente los hombres que formaban el Batallón vega. Quizá Giuliano estaba dando una pista de quiés estaba detrás, porque la banda de Giuliano no era, ni mucho menos, tan numerosa.
El nombre de Fra Diavolo, muy presente en la novela de Mario Puzo e indudablemente relacionado con Portella, no aparece ni una sola vez en las actas judiciales. Su vida en los años anteriores pasa por Sicilia, donde forma parte de los hombres de Giuliano, y Florencia donde regenta una trattoria en la que recive a hombres de los servicios secretos. Está demostrada su presencia en la mañana del primero de mayo, y es evidente su relación como confidente con la policía. Su muerte a manos de los carabinieri podría esconder los mismos motivos que la muerte de Giuliano y Pisciotta.

jueves, enero 25, 2007

AMERICANOS EN SICILIA, EL ÚLTIMO BANDIDO (I)

Ya en alguna ocasión me he referido a los hechos del día primero de mayo de 1947, cuando las montañas de Montelepre presenciaron la matanza de once personas, entre ellas varios niños, a manos de un supuesto ataque de la banda del bandido Salvatore Giuliano. Como ya se ha dicho, pocas cosas en esta historia estan claras, salvo esa misma: que nadie ha pagado por esas muertes. Las investigaciones de G. Casarubea, historiador siciliano residente en Partinico e hijo a la vez de un sindicalista asesinado por elementos mafiosos, arrojan mucha luz a un crimen que muchos califican de Estado.
En primer lugar hay que reseñan que no existe una valoración clara de la figura de Giuliano. Su vida ha sido novelada -por Mario Puzo- y llevada al cine con más o menos éxito (Francesco Rosi da una lección magistral de cine y política en su cinta, y Cristopher Lambert fracasa en la adaptación al cine de la novela).
¿Cómo fue la vida del bandido? ¿Fue un Robin Hood siciliano? ¿Fue amigo o enemigo del pueblo? A su espalda descansan hoy más de 400 víctimas, entre ellas hombres del cuerpo de carabineros, pero también muchos sospechosos de traición y simples sindicalistas que murieron cuando Giuliano puso al comunismo como la lacra a combatir. Célebre es su carta al presidente Truman, en la que un periodista norteamericano hizo de mediador, notable aportación al género epistolar en la que Giuliano se ofrecía como cabeza de un ejército enrabietado por el "intolerable aullido de los perros comunistas".
¿Qué hay de oculto en la historia del último bandido? ¿Luchó contra la mafia de la época, o era un protegido suyo? ¿Eran mafia, bandidos y carabineros una sola cosa, como la Trinidad, como dijera Gaspare Pisciotta, lugarteniente de Giuliano?
Sin lugar a dudas, la relación entre bandidos y mafia es íntima desde 1860, primeros años en que se da una porganización criminal estructurada en la isla. Cuando los bandidos secuestraban a alguien, los familiares sabían a quién dirigirse, es de cir, al mafioso local. La mafia hacía de intermediaria en los secuestros a cambio de una comisión, pero su colaboración no quedó ahí. Cuando la causa de los bandidos comenzaba a flaquear, la moda del separatismo los volvió a poner en guardia. Tras la creación del nuevo estado italiano surgido tras la Segunda Guerra Mundial, las voces separatistas en Sicilia se mezclaban entre izquierdistas y neofascistas que, escondidos en la isla, empezaban a organizar facciones armadas dispuestas a frenar el auge del comunismo.
El frente separatista llegó a organizar una revuelta en la que Giuliano colaboró atacando cinco cuarteles de Carabinieri, aunque la rebelión fue aplastada.
Cuando el separatismo pasó a mejor vida, Giuliano se ofreció a la única causa en la que encontraría dinero y poder a su servicio: el anticomunismo. En abril de 1947 las fuerzas izquierdistas agrupadas en el Bloque Popular obtuvieron el 30% del voto en las elecciones a la asamblea regional de Sicilia. Días después, el primero de mayo iba a servir para celebrar la victoria de las clases populares. Muchos vecinos de Montelepre y pueblos de la zona acudieron a las montañas para festajar, entre discursos y bailes, los tiempos de esperanza que estaban creando. Pero algunas personas tenían otro plan.

miércoles, enero 17, 2007

LAS AMISTADES PELIGROSAS


La vida y la muerte de Salvo Lima son el mejor ejemplo para explicar cómo se relacionan mafia y política en Sicilia. Protegido del alcalde palermitano Vito Ciancimino, político salido de los años democrisitanos de Amintore Farfani, Salvo Lima fue responsables del llamado 'Saqueo de Palermo' de los primeros años sesenta. Una década en la que la ciudad pasó a ocupar miles de nuevas hectáreas, con el consiguiente llenado de bolsillos para promotres y constructores de oscura procedencia. La jugada fue preciosa. Uno de los oficiosamente responsables de construir una considerable cantidad de edificios resultó ser el guarda que vigilaba la obra. Y así muchos más. Políticos como Lima y Ciancimino se llenaron los bolsillos de una manera exagerada. Fue la época en que Cosa Nostra vio en el hormigón un gran filón que explotar. Claro que para ello necesitaba una alianza con los principales responsables políticos, léase Democracia Crisitana, léase Ciancimino, alcalde de Palermo, léase Salvo Lima, y léase grandes hombres de Roma, con Giulio Andreotti en los primeros puestos.
Peor nada dura cien años, ni siquiera el salvaje asalto al tesoro público que estos hijos de la iglesia practicaron. La subida al poder en Cosa Nostra de los corleoneses puso en el punto de mira a los 'amigos políticos'. La alianza político-mafiosa pasaba a ser una discreta relación que acabaría disolviendose en los años del maxiproceso, allá por 1986.
El maxiproceso a la mafia no terminaba de inquietar a los grandes hombres de honor. La consigna era que todo el juicio y sus sentencias acabarían refutadas por el tribunal Supremo y Constitucional. De ello se encargarían los políticos afines. Pero no fue así. Ni siquiera los políticos pudieron actuar contra la labor de los jueces antimafia. En los primeros días de 1992 la sentencia del maxiproceso se ha´cía efectiva. No cabían más reclamaciones. No había más recursos. Los grandes capos irían a la cárcel, y sus fortunas pasarían a ser de dominio público. Antes de eso, Salvo Lima se había ido con la música a otra parte, concretamente a la Eurocámara, donde fue parlamentario.Cosa Nostra entendió su 'retirada' a Europa como un abandono. Lima no cumplió su parte del trato, y abandonó a la mafia cuando más se le necesitaba.
Si las sentencias del maxiproceso se cumplían, Cosa Nostra iba a hacer cumplir también las suyas. El 12 de marzo de 1992 un comando acababa con la vida de Salvo Lima en el barrio residencial de Mondello. No sería el único. También caería Ignazio Salvo, uno de los hombres más ricos de la isla, hombre de honor de la famillia de Salemi y puente entre la familia mafiosa y la Democracia Cristiana de Sicilia y Roma.
El juez Giovanni Falcone vio en el asesinato de Lima el principal signo de que algo estaba cambiando: Cosa Nostra estaba cumpliendo sus sentencias. Sabía que él mismo estaba en la lista. Si el maxiproceso tenía un final de cárcel para los mafiosos, sus responsables también tendrían un final. Y los políticos 'amigos' que dejaron actuar a los jeces también. Por eso Salvo Lima está muerto.

jueves, enero 11, 2007

Y de Nápoles, ¿Qué?

Maravillado ante la rapidez de la justicia, no encuentro ni una sola noticia sobre Nápoles en los últimos días-meses. ¿Solucionado? A mediados de octubre estuve en Nápoles, comprobando, como era de esperar, que todo seguía igual. A mi regreso a España encuentro en El País: 'Nápoles, fuera de control'. ¿En serio? ¿Podía uno concebir que la ciudad donde ha estado paseando, comiendo, disfrutando, bebiendo, sea un lugar fuera de control del Estado? Así es, así era. Lo bonito era ver que para el periódico, alarmado, debía de ser ya una situación insostenible, clamando al cielo. La realidad es que la situación ni era tan mala, ni era tan nueva. De hecho, un mes y medio después no encuentra uno ni rastro en los periódicos. A día de hoy pueden ser 20 los muertos en este 'rebrote' violento qye ya acabó. Muchos, sí señor, pero nada que ver con las guerras de los años ochenta, con más de dos muertos al día en un año. En fin, esperemos que no haya mucho por publicar en la sección Internacional para volver a escuchar algo sobre Nápoles. O a algún muerto espectacular. Es la única realidad de Nápoles que merece la atención. Lo demás, haganme caso, minucias. Como si no existiera.