Las elecciones regionales en Sicilia son vitales para regenerar una clase política en estado comatoso, sin un ápice de honestidad. No podía ser de otra forma, Salvatore Cuffaro ha revalidado su título de presidente regional, aunque la candidatura de Rita Borsellino, en el centro-izquierda, ha experimentado un icnreible ascenso. No es fácil para alguien que basa su programa político sobre una idea: la lucha contra la mafia. Por eso es una gran noticia la pérdida de votos de Cuffaro, la llegada de Borsellino a la cámara, y ante todo el freno a la derecha en las alcaldías de Roma, Nápoles y Turín. No es por preferencias ideológicas, sino por echar la vista atrás y obser var quiénes son los amigos de Berlusconi en Sicilia. Paura
miércoles, mayo 31, 2006
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